Las actividades programadas comenzaron a las siete y media de la tarde, en la Plaza Babel, donde se instaló un túnel del terror, hubo reparto de caramelos y chucherías y se celebró también una castañada embrujada.
En total, fueron cerca de 400 las personas, entre jóvenes y mayores, que disfrutaron de esta noche de terror en la víspera del Día de Todos los Santos. La gran mayoría acudió, además, ataviada para la ocasión.
Los participantes estuvieron acompañados en todo momento por el presidente de la Junta Local de Almerimar, Inocencio Gabriel Manzano.